Los Juegos Olímpicos Londres 1908 tiene un significado especial para el running porque desde ese entonces se cambió la distancia del maratón.
En un principio Roma iba a ser la sede de los Juegos Olímpicos de 1908, pero los italianos cedieron la organización a Londres en 1907 debido a los graves problemas económicos y sociales que había causado la erupción del Vesubio un año antes.
Los juegos se celebraron entre el 27 de abril y el 31 de octubre, donde participaron 2.008 atletas, de los que 37 eran mujeres, procedentes de 22 países. Hubo 110 pruebas, entre las que debutó el fútbol como deporte olímpico. Sin embargo la prueba más importante fue el maratón, ya que el Comité de Organización estipuló la distancia del maratón en 42 kilómetros y 195 metros; los últimos 195 metros fueron añadidos para que el recorrido fuese desde el Castillo Windsor hasta el palco real en el estadio de Londres.
En aquella época se hacían maratones con una distancia no oficial de 41 kilómetro y algo pero desde esas olimpiadas todo cambió por el deseo de la Reina Alejandra, quien era esposa del Rey Eduardo VII, la salida del maratón olímpico se modificó y realizó desde el Palacio Real de Windsor y se alargó el recorrido en 195 m más para que los atletas terminan su recorrido justo delante del Palco de la reina, Alejandra de Dinamarca (1844-1925), esposa del rey Eduardo VII (quien moriría, por cierto, dos años más tarde) y por lo tanto también Emperatriz de la India. Alejandra sufría una leve cojera por una grave enfermedad y se le concedió la gracia de alargar la Maratón para que ella no tuviera que bajar del Palco y acercarse a los ganadores para otorgarles la medalla
La reina Alejandra de Inglaterra entrega el trofeo a Dorando Pietri, segundo en la maratón de los Juegos Olímpicos de Londres 1909. Fotografía:1908 Olympic Games Imágenes de Stock .Fue a partir de ese mismo momento que la distancia del maratón quedó definida oficialmente en 42.195 .
El calor se adueñó de los corredores / Fotografía:1908 Olympic Games Imágenes de Stock .Dura de correr
También hubo una participación casi agónica en la Maratón de Londres. Se celebró el 24 de julio y dio comienzo a las 14:33 horas, por lo tanto se puede uno imaginar las altísimas temperaturas. Participaban 56 corredores, entre los que se encontraba el que había demostrado el año anterior ser el mejor velocista de Italia, Dorando Pietri (1885-1942).
Pietri realiza una buena carrera al principio, pero en los últimos kilómetros, deseoso de adelantar a otros rivales, efectúa un cambio de ritmo que le hacen sufrir más de la cuenta y comienza a sentir los efectos de la deshidratación. Ya dentro del Estadio, hasta cinco veces cayó al suelo ante una multitud de espectadores que asistieron atónitos a la reacción de varios jueces que en todas las ocasiones le ayudaron a levantarse y a proseguir la carrera. No obstante, logró finalizarla en 2 horas con 54 minutos, llegó primero a la meta seguido del estadounidense John Joseph Hayes (1886-1985), pero éste presentó una queja por la ayuda recibida por Pietri y fue aceptada.
El campeón Olímpico sería Hayes (quien marcaría, además, el primer récord en la Prueba Olímpica de Maratón), el segundo fue el sudafricano Charles Hefferon y Pietri resultó descalificado y sin medalla alguna, pero recibió una copa de plata de manos de la reina Alejandra como reconocimiento a su extremo esfuerzo.
