El dolor en las pantorrillas puede ser provocado por la realización de actividades físicas demasiado exigentes y pueden desencadenar contracturas o sobrecargas de dichos músculos
Las pantorrillas están compuestas por músculos, tendones, ligamentos, nervios y vasos sanguíneos y esto crea la posibilidad de que se pueda generar un intenso dolor.
El dolor que se siente en las pantorrillas cuando se trota o corre sucede tanto en principiantes como en avanzados. Esta molestia en las pantorrillas, suele sentirse solamente cuando se produce el impacto que precisamente genera cada zancada.
Tipos de Dolores en las Pantorrillas
Hay dos tipos de dolores que se presentan en las piernas al trotar o correr:
- Uno que vendría a ser el dolor muscular que se genera sobre los músculos de las pantorrillas (tríceps sural: soleo, gastrocnemios o también conocidos como gemelos), éste usualmente suele sentirse también aun en estado de reposo (cuando estamos sentados o sentadas o aun cuando estamos acostados u acostadas) y que se intensifica más cuando se camina, se trota o se corre.
- El otro dolor que se produce en las pantorrillas y de hecho que se suele manifestar más hacia la parte anterior y medial (el frente y lado de la pierna, respectivamente) de la parte distal de la pierna, y que solamente se siente o bien cuando se hace presión sobre la zona afectada o bien cuando se genera el impacto del trote o del correr, se conoce como periostitis se siente más aun cuando se trata de personas principiantes y/o personas que llevan un buen tiempo sin trotar o correr y que luego retoman.
Otro factor que desencadena este dolor en los músculos de las pantorrillas antes, durante y/o después de trotar o correr es el no haber calentado bien antes de iniciar la sesión de jogging o running y el hecho de no estirar bien después de entrenar.
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¿Qué se puede hacer para evitarlo?
Antes de empezar a trotar para evitar un dolor intenso durante de la sesión de trote o de correr, lo recomendado es realizar ejercicios de movilidad articular para ir aumentando gradualmente el riego sanguíneo.
Luego realizar unos cuantos metros de caminata rápida (3-5 minutos), luego empezar a trotar de una forma relativamente suave (5-10 minutos), y luego sí empezar a trotar de una forma más rápida o si se lo prefiere ya empezar a correr.