El primer radio es una unidad funcional cuya importancia radica en el papel que desarrolla en las fases de la marcha de apoyo completo y propulsión, formando un arco longitudinal interno capaz de adaptarse a las irregularidades del terreno así como ser un segmento rígido para empujar el peso del cuerpo hacia adelante
La estructura funcional denominada PRIMER RADIO, se puede considerar un pie dentro de otro. Lo expreso de esa forma porque el primer radio, conformado anatómicamente por el primer metatarsiano + falange proximal del Hallux + falange distal del Hallux; es en sí mismo un sistema músculo/esquelético que posee movilidad en dos ejes (el eje transverso y el eje vertical). Alrededor del eje transverso u horizontal y siguiendo el plano sagital se producen los movimientos de amplitud articular activa/pasiva flexo/extensión o flexión dorsal y plantar de esta congruencia articular. Por su parte alrededor del eje vertical se producen los movimientos de abducción (separación) y aducción (acercamiento) del primer dedo a la línea media del pie y corporal. Entender la importancia del comportamiento biomecánico del primer radio es vital, tanto para los estudiosos de las ciencias aplicadas al deporte, como para los practicantes del running, ya que les permitirá entender los apoyos patológicos en la fase de despegue.
Si cerráramos los ojos por un momento y nos imagináramos las distintas fases que atraviesa el tobillo y el pie durante la caminata y la marcha, quizás por primera vez nos vamos a percatar que la responsabilidad biomecánica de la última fase del patrón de marcha correspondiente a la fase de despegue de los dedos y que corresponde a lo que se denomina el 3er Rocker y también llamado Windlass Pasivo, recae sobre el primer radio.
Sin temor a equivocarnos entonces podemos inferir que el éxito de la fase de despegue de los dedos, la fuerza de propulsión (no toda) y la direccionalidad de la marcha dependen mecánicamente del primer radio por lo que entender sus características articulares será muy importante.
Cuando comienza la elevación del talón, para dar inicio a la fase de despegue de los dedos y se va dando carga a la extremidad contralateral (la opuesta al movimiento durante las fases de marcha), los metatarsianos externos; es decir META 3, META 4 y META 5, van perdiendo progresivamente su contacto sobre el suelo y se va formando un triángulo imaginario de apoyo entre el primer y segundo metatarsiano y el pulpejo del primer dedo (dedo hallux). Por esta razón la naturaleza fue sabia y las características estructurales del primer metatarsiano lo diferencian en mucho del resto de los otros 4, ya que en paralelo aparte de la fuerza flexora dorsal pasiva de impulso el primer radio es el responsable de diluir los vectores de fuerza de barrido lateral del pie; utilizando para ellos la estabilidad que le brindan el músculo peroneo lateral largo (inserción distal debajo de la porción central y plantar del primer metatarsiano).

Es importante conocer que hay dos músculos que generan una fuerza resultante hacia atrás; es decir desde el mediopié hacia el retropié y que cuando esa fuerza que es la ejercida por el peroneo lateral largo que tiene características abductoras (alejar de la línea media) y compresiva hacia atrás y la del tibial posterior que es aductora (acerca a la línea media), ocurre se genera compresión posterior del tarso y específicamente del cuboides contra el calcaneo, con el cual establece una articulación exacta en sus carillas articulares que se denomina de “encaje recíproco”, con un altísimo grado de congruencia entre ellos. El detalle importante de esta articulación estriba en el hacho que durante la fase de propulsión el cuboides que está rotado o pronado se bloquea con el calcaneo dándole rigidez-estabilidad-fuerza de propulsión al pie para el impulso después de la fase de despegue.
Otros músculos también participan en la mecánica del movimiento del tobillo con repercusión en la METATARSOFALÁNGICA 1; sin embargo quisiera acabar este artículo que obviamente tendrá más explicaciones refiriéndome al hecho que de tener una buena amplitud del movimiento articular en la articulación META 1, (metatarsofalángica 1); es decir que la relación articular entre la cabeza del primer metatarsiano y la primera falange del dedo hallux (1er dedo o dedo gordo), debe permitir libertad de movimiento en flexo/extensión porque de lo contrario en la fase de despegue de los dedos, de estar limitada por lo que se llama HALLUX LIMITUS o HALLUX RIGIDUS por mecanismo de inflamación y desgaste Articular; entonces al momento de despegar los dedos en la fase de propulsión nos veremos obligados a sustituir los apoyos completos por contracción de la musculatura extensora de cadera y comenzarán nuestros problemas en la mecánica de la caminata o marcha, los dolores de pie y tobillo y las patologías asociadas en las estructuras músculo/esqueléticas ascendentes desde los pies (rodillas-caderas-columna vertebral).
Por cierto:
¿Sabrían ustedes decir de quién es este pie tan feo y deforme?
¡Hasta la próxima correcaminos!
Luis Padrón Cabrera