Si bien, en el mercado se encuentra una amplia variedad de bebidas isotónicas que permiten recuperarse tras un esfuerzo intenso; el agua de coco es considerado el isotónico ideal durante y después de entrenar, pues sus propiedades lo colocan un paso delante.
El coco verde es el origen de ésta bebida deportiva natural, a la cual la FAO ha respaldado con una técnica de embotellamiento que permite su comercialización para rehidratarse tras el deporte.

El agua de coco es una opción natural
Comenzando por las propiedades que aventajan al agua de coco, tenemos que es cien por ciento natural, bajo en calorías y una excelente fuente de agua, minerales y electrolitos (especialmente magnesio, sodio y potasio), mismos que perdemos con el sudor.
Según un estudio publicado en junio de 2002 en la Journal of Physiological Anthropology and Applied Human Science (revista de antropología fisiológica y ciencia humana aplicada), señala que consumir agua de coco después de ejercitarse puede ser una manera más efectiva de rehidratarse que tomar agua simple o una bebida para deportistas.

De hecho, a los participantes del estudio antes mencionado, el agua de coco les causó menos trastornos estomacales e indicaron que tenía un sabor que preferían. Además, logró restaurar de manera efectiva los niveles de agua y electrolitos perdidos tras el ejercicio.
Otra ventaja es que, a diferencia de los isotónicos artificiales que no nos calman la sed y nos aportan azúcares, el agua de coco es una alternativa saludable, refrescante, libre de azúcar añadida, ingredientes artificiales o colorantes comestibles. Además de rica en antioxidantes y 100% vegetal.

Un suero ampliamente recomendado
El agua de coco es considerado un suero natural, que nos ayuda mejorar cuando estamos deshidratados o enfermos.
Posee un efecto hidratante y reconstituyente debido a su elevado contenido en potasio (indispensable para el funcionamiento de los músculos y la generación de energía al cuerpo) y a los niveles de concentración de sales minerales que posee, muy similares a los de nuestra sangre. De aquí que sea tan efectivo a la hora de ayudar al cuerpo a recuperarse.

Aumenta tus defensas
El agua de coco sobresale respecto a otras frutas, por su magnífica composición de minerales como el hierro o el zinc, además de vitamina C, que te ayudarán a reforzar tu sistema inmunológico y protegerte de los resfriados. Muy importante si deseas salir a entrenar en óptimas condiciones.
Por otro lado, es diurética y depurativa. Sus enzimas y contenido en fibra son ideales para combatir la retención de líquidos y hará tus digestiones mucho más ligeras.

Un sinfín de beneficios
El agua de coco tiene tantos beneficios que quizá nos tomaría mil caracteres más hablar de ellos. Sin embargo, entre otros beneficios asociados a la actividad física tenemos que ayuda a hacerle frente a problemas como las flatulencias, previene el estreñimiento, regula la tensión, favorece el corazón (disminuye el riesgo de padecer un ataque al corazón y otros problemas cardiovasculares), favorece la regulación de los niveles de pH del cuerpo y por si fuera poca, ayuda a prevenir los signos del envejecimiento prematuro, entre otros.
Así que, ¿qué prefieres?, ¿agua de coco o bebidas isotónicas artificiales?