Todos se preocupan de apretar el abdomen y los brazos, tonificar muslos y reducir la cintura olvidando otras partes del cuerpo que se ven afectadas con el ejercicio, por ejemplo, la piel.

El deporte es sano para tu salud, pero sólo darte una ducha después de hacer ejercicio no es suficiente para cuidar la piel. Cuando realizas deporte, tu piel trabaja de sobremanera. El primero de los efectos, evidentemente, es sudar, pero no es el único. A consecuencia de la transpiración, los poros se dilatan y la piel se deshidrata, al activar nuestra circulación, aumentamos el crecimiento celular considerablemente y la eliminación de toxinas es muy notable.

Si vas a realizar cualquier actividad física, pon atención a estos consejos para cuidar la piel antes y después de hacer ejercicio.

– Antes de practicar cualquier actividad física se debe tener la piel muy limpia. Quitar el maquillaje, ya que obstruye los poros.

– Ideal es hidratar el rostro con agua mineral o de rosas y pulverizador.

– Siempre que se haga ejercicio al aire libre debes usar un bloqueador solar para proteger la piel de quemaduras y manchas.

Cuidar la piel es más que darse una ducha

– Es importante darse una ducha post-entrenamiento para quitar de la piel rastros de suciedad o cloro. Si eres amante de las duchas calientes y largas, lo siento, pero esto no es lo mejor tras tu sesión de entrenamiento . Las altas temperaturas dañan la capa externa de tu piel resecándola. Lo más recomendable es que sea una ducha corta y con agua templada que te ayudará a refrescar, relajar y tonificar.

– En el momento de la ducha es recomendable una exfoliación del cuerpo, al menos una vez al mes, para limpiar bien los poros, las toxinas que tu cuerpo expulsó durante el ejercicio y retire las células muertas, además de ayudarte a drenar y reactivar la circulación.

– Luego de la ducha usar una buena crema hidratante. Es recomendable usar gel de aloe vera que proporciona una humedad intensa, ideal para después de haber entrenado al aire libre.

Cuidar la piel también es hidratarse adecuadamente, antes, durante y despúes del ejercicio.
Cuidar la piel también es hidratarse adecuadamente, antes, durante y despúes del ejercicio.

Cuidar la piel es también hidratarte, no olvides beber agua antes, durante y después del ejercicio, una alimentación a base de frutas y verduras también colaboran para que la piel esté sana y se mantenga a pesar de la alta sudoración.

El resultado será una piel oxigenada, nutrida y más suave, además de evitar el envejecimiento prematuro y la flacidez.